Préstamos en pareja: qué hacer en caso de divorcio

Las personas que se casan generalmente lo hacen porque buscan compañía, compromiso, alguien con quien crecer y también compartir responsabilidades, lo que los lleva a decidir sobre tópicos trascendentales en conjunto, como tener hijos, comprar propiedades y bienes y solicitar préstamos. Sin embargo, lamentablemente el “hasta que la muerte los separe” no es siempre algo que se cumple a cabalidad y terminamos obteniendo cifras como las del 2017, cuando ―solo en los primeros tres meses del año― España tuvo más de 30.000 divorcios según el Consejo General del Poder Judicial.

En el momento de solicitar un préstamo, más aún cuando se trata de un crédito hipotecario, las entidades financieras tienden a ver con mejores ojos la existencia de dos titulares, pues los ingresos de cada uno ofrece una mayor estabilidad económica. Esto podría generar que sea aprobado mucho más rápido e incluso a que puedan obtenerse mejores condiciones en la negociación. Por ello muchas parejas dan el gran paso y solicitan sus préstamos personales en conjunto. El problema es que, a veces, la relación simplemente no funciona y no hay mucho que hacer al respecto. Es ahí cuando surge la gran interrogante, ¿qué pasa con la financiación tras el divorcio?

Sin importar en qué términos acabó la relación o los problemas personales que puedan existir, para la entidad financiera aún hay dos titulares, lo que significa que ninguno de los dos puede desentenderse así como así del compromiso. Por esta razón, buscar una alternativa con la que ambas partes estén contentas resulta tan imperioso. La solución más obvia es vender lo adquirido con el dinero del préstamo, en caso de tratarse de un bien material como una casa o un coche, y reembolsar el dinero al banco, saldando así la deuda. Sin embargo, esto no siempre es posible.

En esos casos, una de las primeras opciones que se pueden ofrecer ―y de las que requieren menos papeleo― es la creación de una cuenta conjunta en la que cada uno, mensualmente, deposite las cuotas que le corresponde. Por supuesto, esto solo será posible teniendo la seguridad plena de que ambas partes cumplirán con el acuerdo. Otra alternativa, que también requiere de confianza, es dejar por escrito en el acuerdo de divorcio cuál de los titulares se beneficiará con el bien adquirido con el crédito y se hará cargo de la deuda derivada de este. Sin embargo, en este caso, ante el banco seguirán existiendo dos titulares, por lo que en caso de incumplimiento ambos recibirán el reclamo. La alternativa final sería realizar un cambio de titularidad, pero para ello es el banco quien debería aprobar a la persona que cargará con el crédito.

Préstamos hipotecarios: cómo reclamar gastos

Uno de los primeros pasos que damos a la hora de comprar una vivienda es buscar una entidad financiera y solicitar un crédito hipotecario. De este proceso, una vez es aprobado, se puede derivar una serie de gastos relacionados a trámites de formalización, como Registro de la propiedad, procesos notariales, Impuestos de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) y gestoría, que en financiaciones de 140.000 euros puede alcanzar hasta los 2.830 euros.

Muchos clientes se ven obligados a cancelar estos importes, pero de acuerdo con la sentencia 705/2015, del 23 de diciembre, del Tribunal Supremo, son los sujetos pasivos ―en este caso las entidades bancarias― quienes debe hacerse cargo de esta parte de la transacción. Por ello, aquellas personas que en el momento de firmar el contrato fueran forzadas a pagar estas cantidades, ahora pueden reclamar el reembolso de las mismas a la entidad.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), son 8 millones de familias las que pueden solicitar la reposición de estos gastos. Para ello, lo más recomendable es que inicien el proceso comunicándose con el banco. Lo ideal es poder lograr un acuerdo, pero bajo ningún motivo debería firmarse algún trato que les impida iniciar un proceso legal más adelante para reclamar la devolución de su dinero.

En caso de que la entidad se niegue a cumplir con la sentencia, el cliente deberá asesorarse e iniciar una demanda para reclamar la restitución de los gastos. De acuerdo a sus preferencias, el proceso puede llevarse individualmente o en conjunto con otros afectados, uniéndose a las demandas colectivas que dirigen algunas organizaciones.

Más allá de los importes antes mencionados, también deben ser restituidas las cantidades correspondientes a la tasación, en caso de haberla realizado previo a la solicitud de la financiación y que la entidad no la haya aceptado.

Mercado inmobiliario: esto es lo que busca el cliente actual

La crisis para el mercado inmobiliario parece haber quedado bien atrás. En la actualidad la situación ha ido estabilizándose y ha habido un repunte en la demanda, el panorama tiene toda la pinta de estar mejorando progresivamente. De hecho, el desfase entre la cantidad de propiedades en oferta y la cantidad solicitada es tal que para el año 2017 fueron concedidas 80.000 licencias para construir viviendas y se espera que para 2018 se otorguen unas 100.000 más. Pero la pregunta aquí es: ¿a qué se debe esta subida de las cifras?

Esto tiene una respuesta sencilla y es: el comprador. El cliente ha vuelto y, luego de años en los que se ha visto económicamente muy limitado, por fin ve su oportunidad de adquirir una vivienda. Pero además, esto no es todo, ahora este es mucho más exigente y meticuloso y está mejor informado gracias al uso de internet y las nuevas facilidades de acceso a la tecnología, lo que ha llevado a las diferentes compañías inmobiliarias a centrarse en él y sus necesidades, por encima de lo que podría priorizarse en el pasado que eran las ventas y resultados.

Pero no solo el mercado y las inmobiliarias han sufrido cambios, el comprador y sus demandas también. De acuerdo con estudios realizados, la edad de más del 50% de los clientes media entre los 35 y los 54 años y se trata en su mayoría de familias que buscan viviendas de reposición. Los factores que priorizan para la adquisición son principalmente el precio ―el cual es importante para 63% de los usuarios―, la ubicación ―la mayoría busca barrios conocidos, donde hayan vivido al menos una temporada―, el acceso a las comunicaciones, la antigüedad del lugar ―las viviendas con entre 6 y 20 años de antigüedad son las más solicitadas―, la calidad de la construcción y la distribución de espacios.

Además, otros puntos importantes ahora son la eficiencia energética de la propiedad, las zonas extra ―como piscinas, áreas comunes y lugares para niños―, el diseño y la luminosidad del ambiente.

Vehículos eléctricos: un garaje adecuado para su recarga

Muchos españoles ya han apostado por la compra de un automóvil eléctrico y se sabe que otro gran número de usuarios estaría dispuesto a invertir en esta nueva gama de vehículos. Uno de los beneficios de esta tecnología es que puede aprovechar el encontrarse estacionado para recargar energía y así beneficiarse de las tasas más bajas del coste eléctrico nocturno. Sin embargo, el principal obstáculo es que tanto el parking como la comunidad cuenten con el inmobiliario y la normativa correspondiente para que así sea.

¿Qué tipo de enchufe necesito?

Lo primero que debes encontrar es el tipo de enchufe que necesita tu vehículo. Si el automóvil es totalmente electrónico, puedes usar enchufes trifásicos que le otorgan una carga más óptima (del tipo 2 o Mennekes o el Americano tipo uno) y si el carro, por otra parte, es híbrido, un enchufe corriente monofásico, de los que emplean las neveras o microondas, podría bastar. La mayoría de los vehículos eléctricos ya vienen programados para ser cargados durante la noche, así que no es necesario que se modifique o regule el voltaje de la casa para esta operación.

Normativa necesaria

A pesar de que un 43% de los españoles está dispuesto a comprar un automóvil eléctrico (porcentaje que aumenta en ciudades como Madrid a un 93%) tener un garaje en donde poder cargarlo (un reducido 15% en las ciudades más grandes) sigue siendo la principal dificultad. Si el inmueble es compartido, resulta aún más complejo, así que por ello se modificó la Ley de Propiedad Horizontal para que la instalación del punto de carga solo amerite una notificación a los propietarios. Así el conductor podrá instalar un conector desde los bornes de su propio contador sin necesidad de hacer mayores modificaciones al parking.

Reportar a la comunidad

El proyecto de instalación debe reportar minuciosamente cómo se va a distribuir el cableado hasta el punto de recarga, dónde van a colocarse los contadores y donde van a ir puestos los enchufes, especificando si esto afecta directamente a la comunidad y de ser una resolución compartida, votarla durante una junta con mayoría simple y vincular los pagos a todos los habitantes incluso aquellos que dimitan de la medida. El desconocimiento de esta clase de vehículos y las instalaciones correspondientes para su recarga, también representa un obstáculo, ya que muchísimos propietarios consideran peligrosa la instalación o se niegan de plano sin evaluar las condiciones.

Tres conceptos básicos para entender tu factura de servicio eléctrico

Potencia, comercializadoras, consumo, distribuidoras, IVA, CUPS, Tarifa de acceso eléctrico… Son muchísimos los términos que ocupan al menos las dos páginas que representan un recibo de luz. Revisarlo, entender cuánto va por los costes, cuánto por el consumo y a dónde va cada euro pagado resulta una tarea difícil, pero luego que comprendemos que la información se encuentra dividida por bloques todo resulta verdaderamente más sencillo.

En los primeros apartados de la factura encontraremos con la información general del suministro: cuál es la comercializadora contratada, qué tarifa tenemos, qué periodo de facturación corresponde y quién es el titular del contrato. Y luego de eso vamos ya viendo cuales son los términos más importantes de la misma.

Conceptos fundamentales

Potencia: este concepto se establece multiplicando el precio del kW de potencia de tu tarifa por tu potencia contratada y los días del periodo de facturación. Es un término fijo dentro de la factura, es decir, su pago no varía así no se haya consumido electricidad en el mismo periodo.

Consumo: esta es la parte que sí cambia dentro de tu factura eléctrica, ya que se constata a partir del gasto energético que hayas realizado. Se mide multiplicando el precio del kwh de tu tarifa de luz por el total de kwh consumidos. El resultado es lo que debes pagar por la luz en casa durante el periodo de facturación.

También en la misma página puedes verificar el valor del impuesto sobre la electricidad, al alquiler de contadores de luz y el IVA. El mantenimiento de los contadores de electricidad va de la mano con el alquiler del mismo, donde por una tasa bastante pequeña la distribuidora se hará cargo de repararlo en caso de cualquier eventualidad. Puedes chequear además el peaje de acceso correspondiente, la tarifa de acceso eléctrico, tarifa de luz, potencia comercializadora y distribuidora contratada.

¿Qué es el CUPS?

El CUPS es básicamente el DNI de tu suministro eléctrico, sus siglas significan Código Universal del Punto de Suministro y es prioritaria a la hora de realizar cualquier gestión o diligencia relacionada con el mismo –como modificar el suministro eléctrico, cambiar de titular, etc.- y su número es único, permitiendo así a las compañías de luz rastrearlo individualmente en la red eléctrica. Los CUPS no dependen del nombre a quien esté asignado el suministro o de quien sea el inmueble, son propios de cada instalación. Así que, si deseas saberlo, solo debes verificar recibos de luz anteriores o llamar a tu compañía de luz ya que ellos guardan el registro de cada CUPS asignado.

CAF Barcelona propone reducir a menos de 40% las licencias de uso turístico

Un número no superior al 75% de los edificios residenciales podrá destinarse a uso turístico y, aunque dichos porcentajes parezcan excesivos, el Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Barcelona se encuentra trabajando en un proyecto de ordenanza para reducirlos a un estimado que garantice la tranquilidad, paz y convivencia de aquellos que viven en Cataluña. La asociación espera poder reducir las licencias a una tasa menor al 40%, sin importar si uno o varios propietarios tienen el control sobre el inmueble.

Para muchos residentes, la meta es lograr prohibir el alquiler turístico de viviendas destinadas solamente a uso residencial, pero esto solo podría ser posible si el acuerdo se lograse por unanimidad entre habitantes y propietarios; estos últimos directamente afectados, oponiéndose firmemente a la medida. Así que este proyecto se encuentra sesgado por un duro bloqueo institucional ya que para lograr aplicarse se necesitan de las tres quintas partes de los propietarios a favor.

Nuevas exigencias

Sin embargo, a pesar de ello, las comunidades plantean exigir a los propietarios que si las edificaciones van emplearse para el alojamiento turístico, estas cumplan con los requisitos establecidos por el Plan General de Ordenación Urbana de Barcelona y el Código Técnico de la Edificación, donde se estipula que el arrendamiento y la capacidad máxima de hospedaje dependa del número de metros cuadrados habitables de la vivienda y se respeten las mínimas condiciones de seguridad, saneamiento y evacuación para garantizar la paz entre propietarios y extraños.

Condiciones

CAFBarcelona también considera fundamental que no basta con una simple declaración del propietario para comenzar de forma plena este negocio, sino que además debe demandársele una licencia de actividad y su inscripción en el registro pertinente. Y que de esta forma, sea muchísimo más sencillo tener la noción de qué tipo de cliente emplea el servicio y llevar así el control para que se cumplan las normativas. También los propietarios deben modificar lo estipulado en la licencia del edificio haciendo constar el uso terciario que le están dando al alquilarlo y bajo qué características se está disponiendo del inmueble.

Consejos para hacer buenas fotos para la venta de un piso

A la hora de vender un piso, sobre todo si está en un entorno urbano, hacer unas buenas fotos es clave para poder empezar el plan de marketing digital que por defecto se hace en toda inmobiliaria cuando llega una nueva vivienda.

Con demasiada frecuencia, los vendedores no se toman lo suficientemente en serio el tema de las fotografías y no podemos esperar vender algo que cuesta más de 145.000€ con seis fotos hechas con nuestro teléfono móvil, y de aquella manera.

Nosotros, queremos darte hoy una pequeña guía de consejos prácticos para hacer buenas fotos que hagan atractivo tu piso para la venta:

  • Busca siempre la luz natural. Una de las cosas que más suele detestar la gente cuando está viendo casas por internet es ver habitaciones con las persianas echadas. El primer instinto es pensar que la casa es poco luminosa, y el segundo que se está intentando encubrir algo.

  • Cuando fotografías, toma vistas dejando la luz natural a tu espalda. Intenta al máximo esta técnica, ya que la habitación aparecerá más iluminada y grande.

  • Intenta recoger un poco las habitaciones. Hay dueños que empiezan a hacer fotos con la mesa puesta, objetos poco decorosos de por medio, o incluso la cama sin hacer. Intenta en este sentido que tu casa esté de revista, como si estuviera recién limpia y ordenada.

  • Enciende lámparas de mesitas auxiliares si ves que la habitación queda un poco sombría, y cuidado con encender las luces del techo ya que pueden alumbrar de forma muy intensa y provocar sombras en toda la habitación.

  • Elige una foto principal con la que identificar el piso. Hay propietarios que se centran en el salón, aunque muchos lo sustituyen por la cocina.

  • No pases desapercibido ningún detalle importante. Si los grifos son de una marca cara, o las habitaciones tienen mando de aire acondicionado centralizado, fotografía estos pequeños detalle que dan valor al inmueble.

  • No abuses de técnicas como el “ojo de pez” que hace la ilusión de que tu piso es mucho más grande. Puede parecer que quieres engañar al futuro comprador.

Breve guía para elaborar la descripción de una vivienda

Cuando vas a vender tu vivienda, además de hacer buenas fotos, es esencial que escribas la descripción de la misma ya que esa breve descripción, complementa las fotos y explican bondades de la vivienda que en la foto puede que no se aprecien.

Para que esa descripción sea efectiva, hemos querido elaborar una pequeña y breve guía de consejos sobre cómo debe de ser la descripción óptima de una vivienda.

  • Palabra clave. Piensa en un concepto que resuma la vivienda y que la haga atractiva. Por ejemplo “ático de dos dormitorios y gran cocina en L’Eixample” o “casa unifamiliar en Costa Brava”. Intenta esa frase que has hecho repetirla unas tres o cuatro veces en tu descripción, sin que sea cargante.
  • Longitud de la descripción. Te recomendamos que hagas un texto que esté entre 350 y 500 palabras. Este tipo de contenidos ayudan mucho a la indexación en Google.
  • Céntrate en los datos. Da datos concretos del piso, como metros cuadrados, distancias relevantes con respecto a otros equipamientos…
  • Dedica cada párrafo a un concepto. Cada vez que vayas a escribir, intenta no dispersarte y dedica cada párrafo a un concepto. Por ejemplo, si empiezas a hablar del jardín o la terraza, o la cocina, intenta que todo el párrafo vaya sobre esa habitación. Intenta que además esos párrafos sean de unas cinco líneas máximo.
  • Evita las mayúsculas. Los compradores, sobre todo los más jóvenes, odian leer textos en mayúsculas porque las mayúsculas significan “hablar gritando” y en internet se consideran un gesto de poca cortesía.
  • Habla de las zonas comunes, no solo del inmueble.
  • Destaca las características históricas, si es que las hay
  • Si tu vivienda tiene equipamientos extras de alto valor, como un garaje, trastero en el sótano, o una piscina, destaca también esos aspectos y sobre todo en el tema del garaje, habla de cómo sería aparcar ahí el coche.
  • Intenta hablar más informativamente que comercialmente. No hace falta dar un énfasis a todo lo que se escribe, y el comprador valora más el rigor de la información que cómo se cuenta.