Las ventanas son uno de los elementos del hogar más importantes. Por lo general, no le prestamos la atención debida. ¡Grave error! Pues por ellas transita la entrada de luz que llega hasta nuestros espacios, además aísla los ruidos externos y regula la temperatura.
Si tenemos en cuenta todo lo mencionado, es importante conocer el material de las ventanas así como sus funciones. Estas pueden ser de acero, aluminio, aluminio con rotura de puente térmico, pvc y madera. Por su parte, los vidrios pueden ser de doble acristalamiento; triple acristalamiento; simples; laminados de seguridad y vidrio templado. Los dos elementos son importantes para la calidad del producto final.
Ahora, analicemos un poco cada material, sus ventajas y desventajas:
Acero. Este material puede ser muy versátil en su diseño, además es muy resistente. Su precio es más barato que otros materiales como el aluminio o el pvc. Entre sus desventajas tenemos que son muy pesadas y que están expuestas a la corrosión. Tienen un bajo aislamiento térmico y esto puede producir humedades de condensación en los bordes.
Aluminio con rotura de puente térmico. Entre sus ventajas destacan el buen aislamiento para evitar las condensaciones. Tienen perfiles más estrechos que las de pvc, por ende, permite la instalación de grandes vidrios. Son ideales para ventanas grandes. Sin embargo, produce grandes emisiones de CO2 durante su fabricación, además es muy costoso.
Aluminio sin rotura de puente térmico. Las ventanas no tienen el aislamiento térmico, por lo que se produce una transmisión de energía por el marco. Es el conocido efecto de “marco mojado en invierno” y muy frío por su contacto directo con el ambiente. Entre sus ventajas tenemos que es ligero, resistente contra la corrosión y muy económico.
PVC. Su principal ventaja es la relación calidad-precio. Es flexible porque tiene opción para ventanas incorporadas, además tiene un buen comportamiento térmico. Entre sus desventajas: tiene perfiles muy anchos, por lo que reduce el área del vidrio.
Madera. Es un material muy versátil que permite cualquier opción que tengamos en mente. Sus emisiones de CO2 son bajísimas. Sus desventajas son principalmente dos: precios elevados y necesitan de bastante mantenimiento.
Como ya vimos, todos los materiales tienen sus pros y sus contras. Lo importante es saber cuál es el que mejor se adapta al sitio en donde estarán las ventanas.